El mar de Aral, una aproximación a un gran desastre medioambiental.

En otro post expliqué el viaje hasta Moynaq (Uzbekistán), pero creo que es interesante hacer una breve explicación sobre el gran desastre que ha sufrido ese lugar.

La visita a la que había sido la cuarta reserva de agua del planeta, el mar de Aral, se convierte en una visita a un desierto, dejando una sensación difícil de describir. El viaje hasta Moynaq (Uzbekistán) es difícil de olvidar, pues las imágenes de los barcos tirados en medio de lo que antes había sido el fondo marino no desaparecen del pensamiento.

La historia de la muerte de este mar (que de hecho es un lago), es una historia más de la actuación irracional humana, una de esas historias que no te creerías si no fuera por la evidencia de la realidad. Sigue leyendo

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Moynaq (Uzbekistán), el recuerdo de un tiempo pasado.

Llegamos a Nukus a las cuatro de la tarde. Nos alojamos en el hotel Nukus, un hotel impersonal, sencillo, pero aceptable.

Nukus es la capital de la república uzbeka de Karakalpakstan, y nuestra intención era ir al norte, hasta Moynaq.

Dedicamos esa tarde a localizar algún transporte que nos llevara hasta Moynaq el día siguiente, y a comprar algunas provisiones para el viaje.

En el bazar encontramos de todo, y aprovechamos para cenar en un restaurante al lado del mercado.

Pusimos el despertador a las seis y cuarto de la mañana. El día siguiente había que madrugar para poner rumbo hacia el norte, hacia Moynaq. El conductor de la furgoneta que habíamos contratado fue puntual.

Moynaq está a unos 220 km. de Nukus. El paisaje es desértico.

Por el camino el taxista paró para comprar gasolina a unos chicos a pie de carretera, gasolina que llevaron en pequeños bidones y botellas. Sigue leyendo

Llegada a Kirguistán desde Kazajistán. Preparativos para cruzar el paso de Torugart.

Kirguistán (Кыргызстан en kirguís, y Киргизия en ruso) es un país muy montañoso situado en Asia Central. El país no tiene salida al mar y su ubicación lo hace especialmente interesante al limitar con la República Popular China por el este, con Kazajistán por el norte, con Tayikistán por el sur y con Uzbekistán por el oeste.

Llegamos a su capital Biskek, o Bishkek, (Бишкек en kirguís y en ruso), con un autobús procedente de Almaty. El trayecto duró unas seis horas, con salida a las 4:35 de la noche. Vimos la salida del sol en la estepa, durante el trayecto, y después de pasar los controles aduaneros, sin ningún tipo de problema, entramos en Kirguistán y dejamos el Tenge Kazajo para adoptar el Som kirguís.

El viaje no fue muy cómodo, la carretera estaba en muy mal estado. Una vez llegamos a Bishkek lo primero que hicimos fue buscar un hotel donde alojarnos. Escogimos el hotel Salima, un hotel muy básico de estilo soviético.

El primer contacto con el país fue su capital, y coincidimos con un evento político, pues ese día, el domingo 14 de agosto de 2005, tomaba posesión de su cargo el nuevo presidente del país Kurmanbek Bakiyev. Sigue leyendo